El tatuaje electrónico diseñado para detectar emociones

El futuro ya está aquí. La ciencia y la tecnología están avanzando a pasos agigantados con aplicaciones de gran valor en el campo de la salud. Uno de los más revolucionarios inventos de la última década ha sido el tatuaje electrónico. Este avanzado dispositivo permite que se pueda vigilar de cerca las constantes vitales del cuerpo humano de forma cómoda, fácil e inmediata. Incluso va un paso más allá con la introducción de mejoras destinadas a la detección de emociones y estados de ánimo. Esta nueva aplicación es de suma utilidad para el estudio del cerebro de las personas que padecen enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer, Parkinson, Huntington o esclerosis. Se puede percibir con la ayuda de sofisticados circuitos en miniatura adheridos a la piel si existen reacciones en el cuerpo ante determinados estímulos realizados a enfermos que padecen alguna de estas patologías.
¿Cómo se consigue esto?
El contacto del dispositivo artificial con la piel y los músculos permite trasladar información de nuestro cuerpo a un sistema electrónico posibilitando así la identificación de emociones y perfiles psicológicos. La información obtenida puede ser empleada para desarrollar estudios e investigaciones que ayuden a avanzar en el conocimiento y tratamiento de las enfermedades neurodegenerativas.
También se aplican en el estudio de pacientes con lesiones cerebrales que han sido sometidos a procesos rehabilitadores. Esta tecnología podrá emplearse para mejorar el control muscular. Son sorprendentes además otros posibles usos para ayudar a las personas que han sufrido la amputación de alguna parte de su cuerpo. En estos casos se persigue dar movilidad en los miembros artificiales implantados con la ayuda de estos sofisticados circuitos en miniatura.
Pero estas no son las únicas posibilidades del tatuaje electrónico. Se abre un amplio campo de usos. Es una opción cada vez más extendida entre aquellas personas que quieren tener información actualizada sobre su temperatura corporal, los latidos de su corazón, la tensión arterial o el estado de hidratación de la piel. Los usuarios de estos dispositivos suelen ser personas pendientes de su salud bien por enfermedad, o bien por la práctica de algún deporte.
Su implantación es muy sencilla y totalmente indolora. El tatuaje electrónico está formado por una capa exterior protectora hecha a base de elementos como la silicona que se pega completamente a la piel adquiriendo la forma de la parte del cuerpo donde la implantemos gracia a su alta elasticidad. Debajo de este parche transparente hay un circuito que emplea tinta electroconductora y unos microleds luminosos, creando un aspecto de circuito eléctrico sobre la piel.
Sustitutivos de pruebas médicas
Cada día se avanza más. Este año un grupo de científicos de Texas (EE.UU.) han desarrollado un tatuaje electrónico sumamente fino que apenas sobresale de la piel que está preparado para realizar electrocardiogramas, encefalogramas o electromiogramas. Este logro se ha conseguido empleando nuevos materiales que tienen entre sus ventajas proporcionar el usuario más comodidad y la capacidad de ser prácticamente indetectables. Los nuevos diseños permiten la adherencia total en la piel, evitando así la formación de burbujas de aire dentro que pueden interferir negativamente en la recogida de información de las constantes vitales del cuerpo humano a través de los circuitos. Pese a su pequeño tamaño, estos nuevos tatuajes electrónicos ganan en precisión y exactitud a otros dispositivos como los termómetros tradicionales o el sensor del electrocardiograma convencional, mejorando así la tecnología al servicio de la medicina y el estudio de la salud.
Asequible y fácil
El tatuaje electrónico es un dispositivo diseñado para que pueda emplearlo cualquier persona con unos conocimientos y preparación técnica mínima. La colocación es muy sencilla. Es aconsejable, sin embargo, informarnos sobre las características y funcionalidades y también sobre dónde debemos colocar el parche para obtener el máximo rendimiento en función del uso que se le quiera dar.
Los últimos modelos de tatuajes electrónicos están preparados para transferir toda la información a una aplicación que podemos descargar en nuestro teléfono móvil. Desde esta APP se puede vigilar en tiempo real las constantes vitales del usuario.
Este tipo de dispositivos tiene un precio medio asequible y una duración adecuada si se siguen las indicaciones del fabricante para su cuidado y conservación.